Arquitectura y seguridad
El G4 está diseñado sobre la base de un chasis de acero ultra robusto en el cual se halla una cabina aluminio mientras las baterías se encuentran en posición central. Esta arquitectura, asociada al sistema de propulsión, ofrece una carga útil residual superior a la tonelada y una capacidad de tracción en carretera de más de 1,4 toneladas, rendimientos sin equivalencia en el mercado del vehículo eléctrico compacto. Contando con suspensiones delanteras McPherson, láminas compuestas traseras y un sistema de doble freno, el G4 se beneficia de la experiencia Polaris en cuanto al agarre al suelo, garantizando una conducción segura.